Lo que de verdad importa

La gestión del futuro de la economía mundial debería estar en manos de los auténticos especialistas en gestión de crisis. Son esos héroes anónimos que, con un presupuesto de calderilla, han fundado hospitales en remotos lugares que carecían de cualquier asistencia sanitaria Fundación Pablo, salvan cada día de la pobreza extrema a niños de la calle, Anidan (Lamú), realizan investigaciones médicas que van a prevenir y evitar la muerte y enfermedades graves de millones de niños al año, realizan proyectos de reconstrucción y construcción de centros sanitarios y educativos en los lugares más desfavorecidos de la tierra -Orfanato en Meki (Etiopia) o ayudan desinteresadamente a los que tienen alguna minusvalía a que ésta deje de ser tal t-oigo-.

Horfanato de Anidan_Lamú. Kenia.

Estos auténticos especilistas en gestión de recursos no piden ni se quejan, no tienen coche oficial ni agasajos superfluos, saben exprimir el dinero en proyectos concretos con resultados tangibles y valiosos que superan con creces lo invertido, sacan tiempo y energía de donde otros se ahogan en un vaso de agua, y dirigen hordas de entusiastas voluntarios cuya recompensa no es un sueldo sino la autoestima de saberse útil. Su lugar de trabajo es el mundo y por lo tanto son flexibles y tolerantes con razas, etnias, sexos, necesidades, clases sociales. Se entienden con todos porque dominan todas las formas de comunicación y viajan en los mas variopintos e incómodos medios de transporte para acceder a los lugares más inaccesibles del planeta.

Hoy, hojeando el periódico asqueada por la espiral negativa a la que ha llegado la política _ corrupciones, paro, celos, rencores, sueldos y coches oficiales vergonzosos_, me pregunto cómo puede ser que los que elegimos, los que votamos libremente, sean del color que sean, lo hagan tan mal.

Ésto no está funcionando... Se me ocurre que quizá todos los llamados políticos deberían trabajar de voluntarios en cualquier lugar de la tierra antes de retomar sus cargos públicos, aprender como gestionan la crisis tantos héroes anónimos a cambio de una sonrisa y comprender, de una vez, lo que de verdad importa....